BUSCANDO EL PATRÓN DE OTOÑO

Estamos en el mes de Octubre, y estamos iniciando el otoño aquí en el Noreste del país, con la llegada del otoño también llega una temporada de bonanza en la pesca de lobina, cosa que vale la pena aprovechar.
El primer tema que quiero tocar se referencia al artículo de “patrones o puntos” que esta en este mismo blog, por lo que si no lo has leído, te sugiero que primero le des una leída antes de seguir con este artículo

Cada pescador tiene su forma de pescar y de explorar zonas, en lo personal, mi forma de hacerlo es con las cañas a la mano, pero sobretodo con el sonar encendido. Me gusta recorrer la presa y buscar estructuras hundidas, así como cobertura, incluso muchas de las ocasiones ni siquiera hago un solo tiro en los lugares que localizo, para algunos esto podría ser buscar puntos, pero yo no lo considero así, lo que hago es reconocer lugares y según el patrón de cada estación identifico cuales son los lugares con probabilidad de éxito por sus condiciones, de esta manera, en un torneo puedo tener muchos lugares a donde ir, que incluso, como lo decía ni siquiera los he probado, pero sé que las condiciones del lugar me incrementarán las posibilidades de éxito.
Basado en lo anterior, no soy creyente de los puntos, soy creyente de los patrones, pero para poder pescar cada patrón, necesito conocer el embalse y las condiciones de cada lugar para poder saber a dónde ir en cada estación del año.
La naturaleza rige las condiciones de la vida, y por lo tanto nuestro comportamiento en cada una de las estaciones del año.
Si vemos en TV canales como Discovery Channel , Nat Geo, Animal planet, etc. Nos vamos a dar cuenta que hay 2 estaciones principales en donde los animales tienen más actividad en la naturaleza.
La primer estación de alta actividad es la primavera, que es en donde los ciclos de reproducción se generan casi en todas las especies, antes de la llegada de la primavera los animales se alimentan y crean reservas para lo que viene, que es hacer sus nidos, reproducirse y cuidar a sus crías con muy poca o nula alimentación durante ese período.
La segunda estación de alta actividad es el otoño, que es donde los animales se alimentan más que en otra estación del año para crear reservas para pasar los inviernos, que a veces llegan a ser muy crudos.
Las lobinas no son la excepción, en primavera es muy fácil localizarlas en la temporada de pre-desove, desove y post-desove, en la primera y la última, las localizamos en las caídas cerca de los bajos, y en pleno desove en los bajos cuidando sus nidos.
En otoño les llega el instinto de alimentarse para pasar el invierno, y empiezan su migración buscando el forraje, pero siempre buscan su zona de confort, que es exactamente en donde las debemos buscar.
La zona de confort es una zona segura en donde las lobinas se sienten protegidas de posibles depredadores, pero sobre todo debe ser un lugar en donde les sea fácil emboscar a su presa para una comida fácil. Durante su migración dentro de la presa las vamos a encontrar en canales y arroyos sumergidos que son como sus “carreteras”, es decir, es por donde se mueven de un lugar a otro, y dentro de esos canales y arroyos, si detectamos piedras grandes, caídas pronunciadas, arboles hundidos o cualquier otro tipo de estructura, esa zona se convierte en un lugar de altas probabilidades de éxito y por otra parte, como las lobinas no empiezan sus movimientos todas al mismo tiempo, o también un poco más entrado el otoño se congregan en los bajos, siempre y cuando tengan agua profunda cerca, ya que siempre buscan tener una ruta de escape a aguas más profundas. Si en los bajos encuentras hierba, y a la vez aguas profundas muy cerca, estás en una zona con muy alta probabilidad de éxito, las sardinas se van a las orillas en otoño, y generalmente se meten entre las hierbas, por su parte las lobinas esperan fuera de las hierbas a que alguna sardina se descuide para devorarla.
Nunca, en ninguna estación del año hay que perder de vista que la lobina es un depredador oportunista y escurridizo, por lo tanto siempre busca lugares en donde pueda emboscar a su presa y siempre busca tener agua profunda cerca. Tomando en cuenta lo anterior, e imaginando el fondo de la presa, hay que buscar en donde se puede esconder y muy seguramente ahí las hallaremos.
Una técnica inteligente es empezar por decir en 20 pies, e irnos moviendo hasta los bajos para encontrar la profundidad clave, que es donde están las lobinas.
Entonces ya sabiendo en que lugares podemos tener éxito, ahora hay que saber que usar y como usarlo.
Una muy buena opción, es imitar al forraje de la zona, si son sardinas podemos usar un jerk bait, un rattle trap, paletones, soft jerkbaits (slugo o super fluke), swimbaits, spinner baits,etc. Si vemos las sardinas saltando, una excelente opción son los señuelos de superficie como el zara spook y los buzzbaits, también funcionan muy bien los plásticos tirados en las hierbas sacándolos hacia lo profundo.
Los arreglos en plásticos tirando en los bajos pueden ser el Split shot, el weigthless (sobre todo con los soft jerkbaits) , jigs y Texas principalmente.
Al buscarlos en las caídas y arroyos, lo recomendable es usar carolinas, paletones spinners ,jigs y Texas.
La mordida puede ser un día muy violenta, y al día siguiente muy sutil, por lo que hay que poner mucha atención a cualquier cambio en el peso de la línea, y también hay que poner suma atención a la línea, que a veces solo se mueve sin sentir ningún cambio de peso o de vibración.
No hay que olvidar que los hooksets son los que suben a las lobinas a la lancha, por lo que a cualquier cambio en el peso de tu línea no dudes en darlo, es mejor subir un mal tronco, que dejar ir una buena lobina...